Uniendo fuerzas contra el cáncer: El Club Trotacalles se une a la AECC en una marcha llena de esperanza

Oct 6, 2023 | Sin categoría

Pilar Iglesias, responsable de Coordinación Territorial de AECC Córdoba, y Fernando Romero, vicepresidente del Club Trotacalles, analizan y recuerdan la colaboración entre ambas entidades de cara a una nueva edición de la Marcha contra el Cáncer que se celebrará en Córdoba el 5 de noviembre.

En un emocionante encuentro que demuestra la solidaridad en su máxima expresión, hemos tenido el honor de conversar con dos figuras destacadas en la lucha contra el cáncer en Córdoba: Pilar Iglesias, Responsable de Coordinación Territorial de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), y Fernando Romero, vicepresidente del Club Trotacalles y un presidente que ha liderado esta entidad deportiva durante dos décadas.

La razón de nuestra reunión fue una noticia que ha generado esperanza en toda la comunidad cordobesa: la colaboración entre el Club Trotacalles y la AECC en la organización de una marcha contra el cáncer. Dos mundos, el deporte y la lucha contra la enfermedad, se unen en un gesto conmovedor para apoyar a quienes enfrentan esta batalla en Córdoba y, al mismo tiempo, para concienciar sobre la importancia de la prevención y la detección temprana del cáncer.

En esta entrevista, Pilar Iglesias y Fernando Romero comparten los detalles de esta histórica colaboración, sus motivaciones personales y cómo la comunidad puede unirse a esta causa. La marcha contra el cáncer, que promete ser un evento lleno de energía y solidaridad, se convierte en una oportunidad para teñir de esperanza las calles de Córdoba y recordarnos que juntos somos más fuertes en la lucha contra esta enfermedad devastadora.

Preguntas a Pilar Iglesias Sauce (Responsable de Coordinación Territorial de AECC Córdoba)

1. Cuéntanos sobre la inspiración detrás de la idea de traer la primera marcha contra el cáncer a Córdoba.

Bueno hace ya 16 años, la pandemia nos robó uno. Me motivó el presidente de la Junta Local de Carcabuey, José María, que vino a la sede y dijo “¿niña, por qué no organizamos una marcha por la vida en Córdoba?”. Automáticamente le contesté “pero si no tengo ni idea de cómo se hace”, a lo que me respondió “yo te ayudo” y como me gusta meterme en todo dije sí.

La primera fue un frio noviembre. La incertidumbre y el miedo se aparcaron cuando fueron llegando autobuses de otras juntas locales de la asociación y el Vial Norte recobró vida y calor con unos 1.500 participantes. A nosotros, nos parecían miles. Recuerdo el paseo del Vial repleto por primera vez de una marea verde llena de esperanza.

Puedo decirte hoy día que fue una experiencia maravillosa que aportó mucho a mi vida. Imagínate, allí estaban enfermos y oncólogos, caminando juntos por un futuro mejor para todos.

Algo importante que no debe quedar en el olvido es que Córdoba fue pionera. De nuestra ciudad se extendió a otras provincias y, posteriormente, surgió “AECC en marcha” a nivel nacional.

2. ¿Cuáles fueron los desafíos a los que te enfrentaste al planificar y organizar este evento pionero en la ciudad?

Todos los del mundo (se ríe). Fuimos llamando a puertas, solicitando ayuda y colaboración y debo decir que la respuesta fue totalmente satisfactoria. Se unieron a este sueño llamado “marcha por la vida” entidades e instituciones, incluso colegios de Córdoba y provincia. Asimismo, un club histórico en nuestra capital como es el Trotacalles. Su implicación fue crucial. No teníamos ni idea de cómo organizar una carrera. Les conocí y les pedí socorro. No podéis imaginar su plena predisposición. Sus caras de “estamos aquí, no te preocupes por nada, cuenta con nosotros” era el fiel reflejo de su buena voluntad. Y sin darme cuanta, estaba trabajando con ellos. Personas solidarias que dan lo más valioso que tiene el ser humano: su tiempo.

3. Y si hablamos de desafíos, describamos también los sentimientos de esa primera prueba.

Los primeros sentimientos fueron de incertidumbre. Tal vez de miedo también. Veía las personas inscritas y reflexionaba en voz alta pensando “¡qué pocos!” “¿estáis seguros de que van a venir?” les decía a las personas que compartían este reto junto a mí. Se reían de mí y ahora entiendo esas sonrisas cómplices. Son expertos y no fallaron al tranquilizarme. Fueron llegando y cuando dieron el pistoletazo de salida… ¡qué subidón! Todo salió perfecto, allí estaban con nuestras camisetas corriendo por la vida. Recuerdo que les abrace emocionada y no sabía ni que decir.

4. ¿Qué apoyo y colaboración recibiste de la administración municipal y de otras organizaciones?

Toda. El Ayuntamiento de Córdoba, por ejemplo, se encargó de toda la infraestructura necesaria para el buen funcionamiento de la marcha, es decir, vallado, recogida de basura, escenario, carpas, agua. Lleva 16 años apoyándonos y asistiendo a la marcha, independientemente del signo político que gobierne.

 5. ¿Cómo has visto crecer y cambiar la Marcha contra el Cáncer en Córdoba desde su inicio?

Año tras año, de boca en boca, de corredor a corredor hemos logrado crecer en aquel proyecto al que nos unimos unos locos que pensamos “Si puedes soñarlo, puedes hacerlo”.

6. ¿Cuál crees que fue el impacto de esta marcha entre la población en general y en la lucha contra el cáncer en Córdoba en particular?

Cuando te diagnostican cáncer, te sientes sola. Sientes miedo, angustia. Me preguntas por el impacto. Saber que en la lucha contra el cáncer no estás solo, que hay muchas personas que hacen, con su participación en esta carrera del cáncer, su reto personal. Sin olvidar que, con la obtención recursos, nos ayuda a seguir investigando para que la persona enferma de cáncer tenga un futuro.

7. ¿Cómo ha evolucionado el evento a lo largo de los años y cuál consideras que ha sido su legado en la sociedad?

Creciendo y creciendo. Cada día tenemos más participantes y lo más importante se despiden de nosotros con una sonrisa y nos dicen “el año que viene cuenta conmigo”. La solidaridad no tiene límites. Sin ella, no seríamos nada.

8. ¿Cuál consideras que ha sido el impacto de esta iniciativa en la conciencia pública sobre el cáncer y en la comunidad en general?

¿Quién no tiene un amigo, un hijo, un hermano, un vecino que no ha pasado por esta enfermedad? Esta iniciativa aúna esfuerzos y da esperanza para muchos. Luchamos para que algún día el cáncer deje de ser una enfermedad crónica. Estamos convencidos de que cada zancada que ellos dan cuando corren, para el enfermo de cáncer, para mí también, es un paso a la vida.

Fernando Romero Vaquero (vicepresidente del Club Trotacalles)

1. ¿Qué te motivó a colaborar en la organización de la marcha contra el cáncer en Córdoba hace diez años?

Recibí una llamada de Pilar Iglesias (Responsable de Coordinación Territorial de AECC Córdoba) solicitando colaboración al club. Asisto a la convocatoria de reunión y le traslado la garantía de que Club Trotacalles colaboraría en su primera carrera y marcha, como así fue. Posteriormente, se lo transmito a las personas socias que no dudaron en colaborar. Diez años después, aquí seguimos.

 2. ¿Cuál fue el papel clave que desempeñó el Club Trotacalles en la realización de este evento?

Para Club Trotacalles fue fácil, pues estamos acostumbrados a la organización de carreras. Creo que transmitimos tranquilidad a Pilar y ella confió en nosotros. Cubrimos las necesidades de salidas/llegadas y los puntos críticos del circuito, junto a los clubes amigos: C.A. Califas, C.A. Cordobés y C.A. Santa Rosa.

3. ¿Puedes compartir algunas experiencias o momentos destacados de la primera marcha contra el cáncer en Córdoba con la participación del Club Trotacalles?

Se genera un espíritu solidario conjunto con los demás clubes. También al ver tantas personas de todas las edades que estaban presentes por una causa común, se percibe que las personas que hoy tienen cáncer no se sienten solas.

4. ¿Cuál crees que fue el impacto de esta marcha entre la población en general y en la lucha contra el cáncer en Córdoba en particular?

Creo que la salida a la calle por parte de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) está consiguiendo mayor participación y sensibilidad en la lucha contra el cáncer. Percibo que está creciendo la idea de que es nuestra lucha, la de todos.

5. ¿Cómo ha evolucionado el evento a lo largo de los años y cuál consideras que ha sido su legado en la sociedad?

Esta marcha y carrera ha nacido para quedarse y será el referente de la lucha de todas las personas para que haya más investigación contra el cáncer porque nos afecta a todos por igual. También, es muy emotivo estar ahí, corriendo, andando o colaborando al ver la alegría que reflejan las caras de todas las personas actuando por un bien común.